PASO 1
En un vaso pulverizamos el azúcar con la ayuda de una batidora potente
PASO 2
Volcamos en el vaso las frutas congeladas y el zumo de limón. Batimos bien.
PASO 3
En un bol montamos las claras a punto de nieve
PASO 4
Añadimos la mezcla de nuestro vaso en el bol y con la ayuda de unas barillas mezclamos bien hasta conseguir que esté todo bien integrado
PASO 5
Vertemos en copas donde vayamos a servir nuestro postre.
PASO 6
Decoramos con alguna fruta que tengamos. Nosotros lo hemos hecho con frambuesas y una hoja de menta
PASO 7
¡Ya lo tenemos!