¿Qué tipos de platos emplear en tus creaciones culinarias?
Algo muy importante en la hostelería es la presentación de las creaciones culinarias.
La calidad de la materia prima, la atención del personal, la variedad de platos y la higiene del restaurante son aspectos básicos a tener en cuenta para triunfar en tu local gastronómico.
Además del emplatado, hay que cuidar los platos en los que vas a presentar una determinada propuesta.
Existen miles de formas que no solo se adaptan a cada tipo de comida como pueden ser las cuadradas, las redondas, las alargadas, los hondos, etc. y cientos de colores que fuera del tradicional blanco, comienzan a tener más protagonismo, como los oscuros ya sean negros, grises o azules.
Ahora bien, ante tanta variedad y posibilidades surge la primera duda…¿qué tipo de platos empleo?, y junto con ella también se deriva la siguiente pregunta… ¿Cuándo elijo uno u otro?
En las siguientes lineas intentaremos guiaros dentro del apasionante mundo de la decoración en la hostelería desde el plano culinario.
El auge de los platos negros
Desde hace unos meses, los platos de color negro han inundado los restaurantes de nuestro país. Y, más concretamente, hay un material que está contando con muchos seguidores hosteleros, los platos de pizarra.
Este tipo de platos dan mucho juego, sobre todo con comidas de color claro, como por ejemplo: una tabla de quesos, una tarta de queso, langostinos, canapés, bacalao, etc.
¡Un truco! para conservar los platos de pizarra lo mejor posible, puedes impregnarlos cada cierto tiempo con aceite de oliva por ambas caras. Con este truco, siempre estarán relucientes, brillantes y mantendrán su color natural.
Pero, además de los platos de este material, los platos oscuros por regla general atraen a los clientes y desprenden mucha elegancia y sofistificación.
Platos blancos sí, pero sin dibujos o adornos
Los platos blancos, el color más convencional, son muy adecuados para la presentación de diversos platos, ya que la comida y sus colores serán el foco de atención principal.
Además, el color blanco influye en la percepción del gusto, según revelan los resultados de una investigación realizada por la Universidad Memorial de Terranova, Canadá.
Eso sí, aunque tengan un fondo blanco, los platos con dibujos o adornos no son bienvenidos, ya que le quitan la atención a los alimentos principales, y tampoco se puede apreciar bien las texturas y los colores reales de los productos empleados.
La misma comida servida en platos de colores (o con adornos) no resalta de la misma manera ni llama tanto la atención al comensal.
El diseño sí importa
Es evidente que la originalidad gana cada vez más adeptos y, sin duda, el cliente agradecerá esta creatividad, pues supone un plus de diferenciación en tu local. Es necesario tenerlo en cuenta a la hora de seleccionar platos para hostelería.
Existen infinidad de diseños: modernos, clásicos, minimalistas, más recargados, etc. Pero, lo fundamental es que la vajilla esté alineada con las características y líneas básicas de diseño de tu negocio gastronómico.
Por ejemplo, los platos de ala ancha son ideales para presentaciones espectaculares, así como aquellos con formas un tanto extrañas.
Los platos cuadrados también pueden ser una buena opción, ya que son muchos los chefs que en los últimos años están apostando por ellos en sus menús.
Recuerda, la base para cualquier plato es la materia prima, así que, si quieres acaparar halagos entre tus comensales, con los productos que te proporcionamos en EHOSA, lo conseguirás sin ninguna duda. ¡Pruébalos!
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