¡Que pierde las vitaminas…!
Ya estamos en la última semana de noviembre ¡qué barbaridad! Hace nada hablábamos de los estupendos productos para hostelería para sobrellevar el calor…
Ahora, más bien uno de los temas de conversación fáciles, aparte del tiempo que siempre está ahí, es, qué tomar, cuándo y por qué para no sobrellevar, más bien aniquilar, exterminar, arrasar por completo los catarros. Entre los miles de trucos caseros se lleva la palma el “Zumo” principalmente de naranja, luego ya por añadidura los ademases de nuestros ancestros como la miel, o unas gotitas de tabasco, y muchos, muchos más…
Un plus, contamos con la frase grabada a fuego que yo creo que ya nacemos sabiéndola “tómatelo ya, que pierde las vitaminas”. Pedimos para desayunar, de postre, o para merendar en nuestro restaurante y al servírtelo amablemente te recuerdan que te lo han servido a la velocidad del rayo “porque hay que tomárselo inmediatamente después”.
Lo curioso del tema es que NO ES ASÍ, lo enfatizo porque es una verdad a medias. Se puede tener zumo exprimido y servirlo 15, 20 y hasta 38 minutos después sin atentar contra la intención saludable de nuestro cliente cuando decidió pedirlo.
Sabed que si pierde propiedades lo hace mínimamente y que siempre es más saludable que NO tomar fruta. No cabe duda que al tomar la pieza entera, ingeriremos la fibra que en el zumo no está, pero ¿cuántas veces los clientes, entre los que me incluyo preguntamos por la opción del zumo para no enfrentarnos a la fruta en un cara a cara que suele terminar con manos pringosas…?
Es una opción, no la desechéis, un zumo natural en una botella o jarra bien cerrada sin estar sometido ni al sol ni al calor, alejado de la luz y refrigerado no perderá TODAS LAS VITAMINAS
En Ehosa siempre abogamos por la comida saludable y más aún por la elaboración saludable de las comidas, no se trata de comer lechuga y pollo a la plancha todo el día, se trata de comer equilibradamente sin excesos y de todo, se trata de cocinarlo con buenos productos, mejores precios y lejos de las grasas.
Los zumos aportan vitaminas, nutrientes y minerales, también antioxidantes tan de moda, pero además os aporta a vosotros un mini cliente, el sector infantil, que obviamente irá con su familia o en su defecto con un adulto.
Podéis incorporar en vuestras cartas un especial infantil, en el que haya una oferta de un rico zumo, elegid vosotros la fruta, la naranja es un clásico pero hay más frutas e incluso pueden ser batidos, si el peque se lo toma y sonríe, podéis estar seguros que volverán, es una buena manera de fidelizar a vuestros clientes con algo tan sencillo, natural y saludable como es la fruta, ¿no os parece?
En estos tiempos todo lo que sea atraer al público hacia vuestros locales es un tesoro, sólo depende de vosotros el hacerlo y cómo.
Algo que siempre podéis tener en la recámara son zumos de sabores diversos, en Ehosa los trabajamos en formatos cómodos, botellines de 200 ml de distintos sabores, melocotón, piña, tomate y naranja. Os dejo a vuestra elección la parte sólida de vuestra oferta, quién mejor que vosotros para saber qué poder ofrecer a nuestros hijos, sobrinos o nietos.
Las posibilidades de usar el zumo embotellado van más allá. Dentro de la cocina, para aliñar ensaladas, crear salsas exóticas o en la versión más “Bartender“, como refresco de un combinado, en sustitución de cualquier derivado de agua azucarada carbonatada, aportando a la mezcla un sabor más natural.
Ponedlo a prueba, cuando lo hagáis que sea escuchando a vuestros clientes, para que cuando ofrezcáis acertéis de pleno y vuelvan.
¡Que os recomienden! , es la mejor publicidad que puede haber, el boca a boca.