Poner una barra de ensaladas en tu negocio

Apuesta de lleno por la libertad de elección de ingredientes y potencia la originalidad de tus clientes

La libertad de elección en cualquier aspecto de nuestra vida es uno de los privilegios más grandes que se pueden tener y en el aspecto culinario no iba a ser diferente. Que una persona vaya a un restaurante y elija el plato que le gusta y que se lo preparen exactamente como le gusta es algo que no siempre se puede conseguir.

Es lógico que cada establecimiento tenga sus recetas establecidas y aunque puede eliminar algún ingrediente a la hora de prepararlo su estilo propio prevalecerá. Sin embargo, sí que hay ciertos platos que pueden modificarse de una manera mucho más sencilla, como es el caso de las ensaladas.

Para que tus camareros no tengan que estar apuntando qué alimentos poner o quitar en las ensaladas de tu carta o para no encontrarte con ingredientes apartados al retirar los platos, te proponemos poner una barra de ensaladas en tu negocio Horeca.

Una barra de ensaladas, sencillez y practicidad

Se trata de un pequeño gesto para ofrecer una alimentación equilibrada y al gusto de cada cliente. Además, es un guiño para las personas que siguen dietas un poco restrictivas por motivos de salud, porque haya determinados alimentos que no pueden consumir o bien que tengan esa dieta por elección propia, como es el caso de los vegetarianos.

Además, tampoco tiene por qué quitarte mucho espacio si organizas bien los alimentos y colocas la barra de ensaladas en un sitio accesible para todos los clientes pero que no esté situado en medio del local.

Limpieza y calidad, siempre por delante

Eso sí, si decides poner una barra de ensaladas en tu negocio, debes tener en cuenta que los ingredientes deben estar siempre perfectos, por lo que tendrás que establecer una refrigeración adecuada en la mesa en la que los pongas.

Igualmente, en la barra de ensaladas debe primar la variedad y esto no significa que tengas 30 tipos de verduras. Tiene que haber otro tipo de alimentos como embutidos, quesos o frutos secos que puedan cumplir las expectativas de todo tipo de clientes.

Contar con un par de tipos de lechugas, tomates, pepinos, olivas, huevo, maíz, cebolla, arroz, patata cocida, mozzarella, zahanoria, surimi, dados de queso curado, trocitos de jamón serrano crujiente, nueces o piñones son algunos de los alimentos que pueden hacer muy completa tu barra de ensaladas. Y no te olvides de poner sal, varios tipos de aceite y vinagres, y diferentes salsas.

¡Ningún cliente podrá decir que no tiene su ensalada perfecta!