Guía para la correcta realización del marcaje de platos en hostelería
En el mundo de la hostelería, los detalles marcan la diferencia.
La atención para con nuestros clientes es fundamental en el trato inicial y a lo largo de todo el servicio.
Por este motivo, no se deben descuidar aspectos como la rápida atención a quienes visitan nuestro establecimiento, la posibilidad de ofrecer un servicio a domicilio o, como veremos a continuación, el marcaje de platos.
Ahora bien, para que el marcaje de platos sea el adecuado, se deben seguir serie de pautas previas, que siguen los mejores restaurantes del país, y que, por supuesto, explicaremos a lo largo de este post.
Toma nota de cómo debes realizarlo en tu establecimiento de hostelería:
¿Qué es el marcaje de platos?
Antes de nada, destacamos que se trata de seguir una serie de pautas muy sencillas que, como ya hemos señalado, será el detalle que te ayude a pasar de un servicio mediocre a uno inmejorable.
Ahora bien, ¿en qué consiste exactamente? Se trata de un concepto propio de la hostelería que se utiliza para referenciar la correcta disposición de los cubiertos y otros elementos como los acompañantes.
En otras palabras, colocar unos utensilios u otros dependiendo del plato que vaya a consumir nuestro comensal. Como ya sabrás, no se utilizan los mismos cuchillos para degustar un plato de carne que otro de pescado, por no hablar de que, lógicamente, el marcaje de platos de una sopa difiere mucho del marcaje de platos de un plato de pasta.
Y, en cuanto a los acompañamientos, un plato de salmón ahumado, por ejemplo, se puede acompañar con un entrante de tostadas y mantequilla.
¿Cómo se debe llevar a cabo el marcaje de platos?
Para que el marcaje de platos sea el adecuado, se deben seguir una serie de pautas previas. La primera de ellas se refiere a la colocación de estos por parte del camarero: se deben colocar siempre desde el lado derecho del cliente, utilizando una muletilla para transportar los cubiertos, que a su vez se coloca con la mano izquierda.
Por otro lado, y como también hemos señalado, el marcaje varía de unos platos a otros. Veamos a continuación algunos de los platos más comunes:
Marcaje de platos para ensaladas y entremeses
En este primer caso, el camarero debe preparar un tenedor de ostras, unas pinzas de espárragos o una cucharilla de nácar dependiendo del plato servido. Y, en el caso de las ensaladas, el tenedor se debe colocar a la izquierda y el cuchillo a la derecha.
Marcaje de platos para pasta y arroces
En este segundo caso, además del tenedor y el cuchillo, se recomienda ofrecer unas pinzas, ya que se trata de un plato (especialmente la pasta) que se suele compartir, por lo que los comensales agradecerán el detalle de ofrecer este utensilio.
Marcaje de platos para carnes
En este caso, lógicamente se deben colocar un tenedor y cuchillo trinchantes. Y, en el caso de las carnes más gruesas, un cuchillo serrado que facilite al comensal cortar la carne.
Marcaje de platos para pescados
El marcaje de platos en el caso de los pescados es un tanto peculiar. Además de colocar un tenedor, se suele situar una pala de pescado a la derecha del plato, un cuchillo trinchante o unas pinzas de marisco, dependiendo del plato que se vaya a degustar.
Y, en el caso de los postres, todo dependerá del plato pedido. En cualquier caso, el marcaje de platos es uno de esos detalles que marcan la diferencia, y que, por ello, no se deben descuidar.
Si quieres conocer más a fondo el Protocolo con los cubiertos, te dejamos un artículo anterior de nuestro blog aquí enlazado con un infografía realmente interesante.