El desperdicio cero como modelo de negocio en hostelería
El zero waste representa algo más que una nueva tendencia, funciona como un nuevo modelo de negocio, que se articula a través de una perspectiva íntegramente sostenible.
Este emplazamiento comercial se traduce en que, además de eludir el desperdicio de comida, resulta esencial aplicar el concepto de “cero residuos” en cualquier clase de basura. De manera que el objetivo, cuando nos adscribimos a la filosofía del desperdicio cero, es que todos los recursos se puedan reciclar.
El modelo de desperdicio cero aplicado a nuestro negocio también tiene un rédito constatable en la faceta de la gestión de las cuentas, generando ahorros significativos, como ya comentábamos en un articulo anterior sobre lo que es y lo que implica el desperdicio cero a la hosteleria
¿Alguna vez has calculado el dinero que pierdes a diario derivado de las sobras y desechos que genera tu negocio de hostelería?
Se calcula que, cada año, el sector de restaurantes pierde casi un tercio de los alimentos que adquiere. Y no hablamos solo de comida. Todo aquello que no se emplee de manera directa en nuestro proceso productivo es considerado un desperdicio.
Cómo podemos conformar una dinámica mucho más productiva y rentable con nuestro negocio
Algunos ejemplos que ayudan a representarse cómo se estructura esta filosofía de negocio son: emplear objetos de plástico de una sola utilización, como las pajitas, bolsas de plástico, o los envases de take away, entre otras posibilidades.
Una de las opciones que más éxito está generando entre algunas empresas del sector es reemplazar los envases de comida por recipientes retornables, pero a continuación veamos cómo construir un autentico modelo Zero Waste.
1- Realiza compras conscientes
Antes de acudir al supermercado mayorista, o reclamar los servicios de tu distribuidor de hostelería, tómate un tiempo para planificar las comidas de tu negocio de restauración. De esta manera, no solo ahorrarás dinero, sino que eludirás el difícil gesto de tirar comida a la basura.
2- Formúlate preguntas que comportan un compromiso con el medio ambiente
¿Este alimento mejora los medios de vida del pequeño productor y su familia?; ¿Qué representan los precios bajos en términos de calidad de vida, consumo consciente y desarrollo sostenible?
Una vez acotada esa filosofía de desperdicio cero en tu negocio, comunica de manera pedagógica y atractiva esa apuesta vital y comercial.
Cada vez más, los consumidores y comensales valoran vincularse a un negocio que prima la coherencia medioambiental y un uso responsable y consciente de las materias primas, en el que se apuesta con convicción por el producto de cercanía y una relación justa y solidaria con los productores, que a su vez velan por un buen trato de la tierra que trabajan y por el bienestar de los animales que generan los productos que comercializan.
3- Identifica los desperdicios
Según la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, un tercio de los alimentos que se producen a escala mundial acaba en el contenedor.
Los expertos señalan que necesitamos prevenir el despilfarro de alimentos en toda la cadena de suministro para aliviar los efectos del calentamiento global y aminorar el uso de agua y la presión ejercida sobre los suelos. Parte de la solución es reducirlo al mínimo.
4- Revisa tu manera de elaborar los platos
Una dinámica en la que hay que revisar cuáles son los ingredientes que sobran en tu cocina, los excedentes de compra, los alimentos caducados, los aceites y las grasas residuales.
En esa dinámica de producción responsable también se incluyen los envases y empaques de los ingredientes o utensilios.
5- Adapte su negocio a los patrones de consumo
La mejor forma de gestionar los desperdicios es procurar prevenirlos. Y no solo hablamos de desperdicios de comida, sino también del esfuerzo, tiempo y dinero que se malgastan en elaborarla si finalmente no se consume.
¿Hay algún plato que no se venda? Quítalo del menú. ¿Los comensales dejan muchas sobras al terminar ciertas preparaciones? ¡Haz más pequeño el tamaño de las porciones!
6- Horizonte de futuro: la economía circular
Se trata de redefinir el sistema para pasar de la economía lineal actual a una circular, replicando los procesos de vida que se desarrollan en la naturaleza.
La economía circular posibilita dar más de un uso a los materiales que conforman nuestro negocio de hostelería. Se trata de modificar el enfoque de la economía y otorgar valor a la forma en la que se elabora y se conserva una materia prima.
En esa línea, es muy relevante el método de producción que se escoge para garantizar que es sostenible el modelo de negocio. Ese círculo virtuoso se traduce en innovación en tu cocina y crecimiento económico.