El aperitivo, solución para abrir el apetito
Si se define España por algo es por sus costumbres, sus usos y tradiciones, y me atrevería a decir que una de las más arraigadas , placenteras y disfrutadas es la de tomar “el aperitivo”.
En cuanto a su origen, algunos autores narran una singular anécdota de principios del S.XIII protagonizada por el Rey Alfonso X. el Sabio que a raíz de sus problemas de estómago le recomendaron que comiera algo ligero entre copa y copa. Así puede que comenzara y así la entendemos hoy.
Con los tiempos que corren el ingenio se ha agudizado y ha llevado a crear y fomentar “la ruta de la tapa”, en ocasiones con la llegada de “la temporada de setas” y en otras simplemente para fomentar el consumo de nuestros “benditos bares” y es que si algo sabemos hacer bien es disfrutar en ellos, en cualquier momento u ocasión y a cualquier hora.
La definición más acorde a su uso actual que podemos encontrar es:
“El aperitivo es la comida ligera que se toma para abrir el apetito, antes de la comida principal del mediodía o antes de la cena”.
En algunos países acostumbra a realizarse en fechas señaladas o festivos y no es común que se haga a diario, mientras que en otros, como en España, Portugal y Francia, es una costumbre extendida a cualquier día de la semana”
Una explicación más que correcta, sin embargo no recoge el espíritu y la esencia de “tomar el aperitivo”. En España al menos, es el momento perfecto para quedar, es un acto social sin precedente, de hecho en ocasiones, en muchas, muchísimas diría yo, el aperitivo se extiende hasta la noche y de qué manera…
Depende de la región en la que nos encontremos veremos las diferentes tendencias, cerveza, vino blanco, manzanilla, vino tinto… cualquier bebida es buena para pasar un rato agradable, charlar, reír, en resumidas cuentas estar con nuestra gente.
No debemos olvidar que se asocia la hora del aperitivo a la frase “la hora del vermut” , procedente del francés vermout o vermouth y del alemán wermut, estamos ante un licor muy asociado al aperitivo compuesto de vino, ajenjo y otras sustancias amargas, que combina perfectamnete con esos bocados que abren el apetito en los previos a las c
omidas.
Bien es cierto que en Madrid donde nos encontramos, según te ponen la bebida lo acompañan con una “tapa” que bien puede ser en invierno unos “callos a la madrileña”, una cazuelita de oreja”, y ya con frío o calor, unas “gambas”, y como no una tapa de “paella” o de “ensaladilla rusa, campera, de pollo”, todas sientan bien.
En Ehosa tenemos una abanico muy amplio, que va desde los encurtidos, pasando por los boquerones en vinagre, anchoas y marisco hasta el mundo de las croquetas, empanadillas, chopitos y llegando hasta los precocinados como la paella y fideúa , sin dejar de mencionar la ensaladilla rusa o cualquiera de sus variantes.
Los encurtidos que ofrecemos son un aliado fundamental para que nunca nos falten para acompañamiento de una bebida. Y no debemos olvidar tampoco la amplia gama de frutos secos que podemos utilizarlos como pasatiempo y a la vez como potenciadores de la “sed”.
Sacad la mejor de vuestras sonrisas, desempolvad las sombrillas y maquinad algo diferente para vuestro aperitivo, algo que nos haga quedarnos en vuestro establecimiento, y nos haga repetir cuantos más días mejor.